La cercanía al cliente llevada al máximo nivel

Todos sostenemos que nuestras empresas se muestran próximas al cliente y dispuestas para atender sus necesidades en cualquier momento y lugar. Todos sostenemos que nuestras empresas quieren la satisfacción del cliente como principio básico de comportamiento. Todos sostenemos que nuestras empresas quieren ser compañeros de viaje de nuestros clientes, acompañándolos en sus éxitos y en sus fracasos. Pero seamos realistas, no todos lo demostramos. Si un cliente nos pusiera a prueba en tres ocasiones, muchos acabaríamos por negarlo, como Pedro negó a Jesús en tres ocasiones antes del canto del gallo tras la Última Cena.

Una de esas empresas que nunca niegan a sus clientes se llama Fornet. Empresa de origen familiar afincada en la capital murciana que se dedica a la venta e instalación de maquinaria de hostelería. Maquinaria, pero también mobiliario, utillaje y accesorios específicos para el sector de la hostelería y el pesaje.

Fornet nunca niega ni abandona a sus clientes, ni desde el aspecto comercial, ni desde el punto de vista técnico. Ni a los grandes restauradores y hoteles de cinco estrellas, ni a la cantina más humilde. Ni antes de realizar una venta, ni después de cerrar una operación y cobrarla. Y aunque esto pueda parecer una afirmación común, no es lo más común en algunos sectores como éste, consiguiendo que la garantía de servicio de Fornet tenga un valor y sea reconocida entre sus clientes. Pero esta no es la mayor señal de cercanía y compromiso con el cliente que ha demostrado Fornet.

Cuando el sector de la distribución ha eliminado, casi por completo, la celebración de demostraciones y presentaciones a clientes de sus estrategias de comunicación, porque la situación económica de los últimos años provocó que la organización de estos eventos dejara de ser rentable, Fornet se embarcó hace algo más de un año en la creación de El Taller, Aula de Gastronomía.

El Taller, Aula de Gastronomía, es un espacio en el que Fornet organiza eventos culinarios dirigidos a un público particular y profesional, como cursos de cocina, pero que también le permite al cliente la posibilidad de conocer mejor la maquinaria que quieren comprar mediante pruebas reales de esos artículos. La creación de este espacio gastronómico le supuso a Fornet, además de una importante inversión económica en remodelación y equipamiento, sacrificar parte de su exposición de venta para adecuarla como show cooking y lugar para que los alumnos prepararan sus propias elaboraciones. Esto es cercanía al cliente llevada al máximo nivel.

Y para el que quiera participar en alguno de sus cursos de cocina, los hay para aprender a preparar arroces, panes, dulces, con niños, de sushi, con catas de vinos, pasteles de carne, ensaladas, para principiantes, y muchos más para sentirse como en casa cocinando con amigos y de la mano de expertos en cada materia.

¿Pero cuáles son los frutos qué consigue Fornet con esta actitud sincera de cercanía al cliente? Mantener la imagen de marca de prestigio que en su día Miguel Fornet Solano comenzó, allá por 1956, y ser la empresa referente del sector. No en vano son la primera opción entre los mejores restauradores de la Región. De hecho, entre sus proyectos actuales se encuentran varios restaurantes y salones de celebraciones por la geografía murciana, una panificadora de pan pita, la escuela de hostelería de economía social de Cáritas y la barra de La Trastienda de Pablo González Conejero, en la planta baja de El Corte Inglés, nuestra única estrella Michelín en Murcia.

¿Es el ejemplo de Fornet y su permanente cercanía al cliente un espejo en el que pueda mirarse su empresa?